Fondo Desarrollo Comunitario
Desde hace ya varios años en el corazón de Patios de la Estación podemos encontrar un espacio de paz, un lugar con conocida reputación en Cuernavaca, ahí se encuentra el “sub-proyecto”, un espacio de encuentro, de apoyo mutuo, de solidaridad, de acompañamiento, convivencia y paz. Un proyecto, que inició por la iniciativa de un pequeño grupo de mamás, curiosamente no tiene nombre, no tiene proselitismo, ni imposición de creencia, ni credo, ni lealtad a algún grupo. Pareciera que al carecer de nombre le diéramos menos importancia, pero quien conoce el proyecto sabe que es todo lo contrario.
Durante los 18 años de su actividad en la comunidad ha sido refugio para centenares de niños y mamás principalmente, y de expresión de la creatividad de muchos jóvenes, y no falta los papás que también ponen su granito. Ya hay una generación que ha pasado por este espacio; algunos se encuentran en la universidad y otros son motores de la economía local de Cuernavaca. Sin espectáculo, ni grandes discursos...ni nombre... porque es un espacio de la comunidad: de todos y nadie a la vez. La comunidad al encontrar bondad y fortaleza en ese espacio para salir adelante saben que es por la comunidad misma. Con eterno agradecimiento de la constancia y dedicación de Fresvinda Arellano quién misma dice que es la comunidad que la ha adoptado a ella, que la ha cobijado - no es una cosa de súper líderes, sino de caminar juntos hombro a hombro.
En la actualidad el Proyecto de Patios de la Estación es un gran esfuerzo de mamás voluntarias que preparan un desayuno nutritivo y delicioso de lunes a viernes, se reúnen por equipos, preparan el menú, hacen las compras y dan de desayunar a más de 100 personas diariamente. Junto con el Jardín de Niños “El Rincón de María Inés” es un oasis de compartir, convivir, crear y trabajar para un mejor futuro.